Artículo publicado en Cultura Inquieta el 4-2-19:
Hemos olvidado cómo es en todo su esplendor la Vía Láctea. Hemos dejado de mirar al cielo porque apenas se perciben las estrellas. Por eso, nos ha enamorado este proyecto que nos recuerda la belleza infinita de la luz que emite el universo.
«Ciudades oscuras», así se llama el trabajo de Thierry Cohen cuyo propósito consiste en mostrar cielos, cielos reales, aquellos que veríamos por la noche, si no hubiera contaminación lumínica ni contaminación atmosférica.
En el último medio siglo, un gran porcentaje de los habitantes de nuestro planeta han dejado de poder contemplar la belleza de la Vía Láctea. Casi la totalidad de sus estrellas se ha vuelto invisible en nuestros cielos. Cohen quiere enseñarnos las estrellas, ayudarnos a soñar de nuevo.
Cohen atravesó el mundo para concretar su proyecto. Su itinerario fusionó las más grandes metrópolis del mundo, como Hong Kong y Nueva York, con los puntos más desérticos del planeta, como el desierto de Mojave y la Amazonía, según su alineamiento latitudinal.
De esta forma, fotografió las ciudades de día para captar la silueta de sus horizontes, las que luego se oscurecieron durante la post-producción. Luego hizo lo mismo con los cielos nocturnos más nítidos que encontró, en este caso, en lugares tan extremos como el Sáhara Occidental.
«¿Qué pasaría si tuviéramos que apagar las luces debido a la falta de energía? Mi escrutinio fotográfico de la calidad del cielo nocturno es también una forma de revelar la urgencia del uso sostenible de los sistemas de energía y la lucha contra el cambio climático».